martes, 17 de abril de 2012

un para siempre

Y se cree que esto tiene final, que tenemos tiempo límite, los días contados, JÁ, que ingenuo. Se piensa que voy a tirar por la borda todo lo que ha construido hasta ahora. Cree que olvidaré sus besos, sus abrazos, sus caricias, aquella partida al parchís. Pues desde aquí he de decirte, cielo, que estás más equivocado que nunca, que como ya te he repetido cien mil veces nada se interpone entre ambos, sí, tienes razón,los kilómetros, la puta distancia de siempre y el tiempo. Pero también te digo que el lazo que nos ata no podrán deshacerlo. Que habrá personas, tiempo, distancia, pero cuantas más razones haya para dejarlo más encontraré yo para seguir, que lo que me haces sentir no se lo vendo a nadie por nada y si te dejo sería dejar mi mundo y no, no quiero.
Te parecerá mentira, pero la vida es como aquella partida al parchís que jugamos ese 7 de abril tan perfecto. He tirado el dado y me han comido millones de veces, pero he vuelto a tirar el dado y me he sacado un 5 y ya estoy fuera, en juego otra vez, a manos de cualquier otra ficha. Lo que no saben es que esa ficha, mi ficha, no pienso moverla del seguro, está bien ahí, en compañía de la ficha que te pertenece a ti y que si la muevo será  para irme a seguro otra vez a tu lado hasta llegar a casa, donde nada pueda comernos y ser feliz contigo para siempre. Pero esto no es todo felicidad, como ya sabes, el dado no sacará el número que queramos, al menos no siempre. Habrá momentos en los que haya que cruzar los dedos para que todo siga bien, en pie, hacia delante. Y te prometo que en esos momentos de tensión estaré ahí, a tu lado, cruzando los dedos contigo para que todo salga bien. Porque esto, esto que tenemos tu y yo entre manos, no tiene final.