miércoles, 21 de diciembre de 2011

una estrella fugaz

estaban tendidos en el césped, estaba húmedo y ella sabía que seguramente se estaba mojando la ropa, pero estando con él todo le daba igual. Era una noche despejada y con millones de estrellas que alumbraban el cielo, estaban los dos embobados mirando al cielo, abrazados, cerca, muy cerca. De repente, ella vio una estrella fugaz:
-Una estrella fugaz!!-gritó.
él giró rápidamente la cabeza, pero no llegó a verla. La chica permaneció callada unos instantes.
+En qué piensas?
-Shhh!! Estoy pidiendo un deseo.
+Y qué pides, que necesitas tanta concentración?
-Es un secreto, si te lo cuento´habrá más posibilidades de que no se cumpla.
+Debes querer que se cumpla ese deseo pase lo que pase.
-No lo entiendes, daría lo que fuera para que ese deseo se cumpliera.
+Si lo deseas con tanta fuerza seguramente se cumpla.
-Ojalá cielo, ojalá.Pero que ese deseo se cumpla no solo depende de mí.
Lo que el no sabía era que el deseo que ella había pedido era que permanecieran juntos el resto de sus vidas y que siempre se amaran como el primer día. Pero no solo había pedido ese deseo cuando había visto la estrella, no, cada cosa que le recordaba a él le hacía pedir y desear con todas sus fuerzas que se amaran para siempre. Ella necesitaba estar con él.


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